Si está cuidando bien su salud, probablemente conozca la importancia de un examen físico anual. Pero los exámenes oculares regulares también son fundamentales para mantener su vista bajo control. También pueden detectar cualquier problema o enfermedad de los ojos temprano, cuando son más tratables. Este es el motivo: 93 millones de adultos en los EE. UU. tienen un alto riesgo de pérdida grave de la visión, y muchos signos de enfermedades graves, como presión arterial alta, pueden detectarse mediante un examen ocular. Aprendamos un poco más sobre este importante examen de salud.
Tanto los optómetras como los oftalmólogos realizan exámenes oculares en un consultorio médico tradicional. Un óptico fabrica anteojos correctivos, pero no es un profesional médico y no realiza exámenes oculares.
La retinopatía diabética es una afección específica de las personas con diabetes y una razón más para hacerse exámenes oculares con más frecuencia, al menos una vez al año, según la American Diabetes Association (ADA). La diabetes aumenta el riesgo de enfermedades oculares frecuentes como glaucoma o cataratas, y es por eso que la ADA recomienda que las personas con diabetes se realicen exámenes de detección cada uno o dos años. Y dado que la genética desempeña un papel en muchas afecciones oculares, consulte a su médico sobre el mejor cronograma de exámenes si tiene antecedentes familiares de problemas oculares.
Cómo prepararse para su examen
Traiga sus anteojos, anteojos de sol y/o lentes de contacto actuales a su examen. También querrá traer una lista de los medicamentos actuales, recetados y de otro tipo, así como cualquier pregunta que tenga sobre su visión.
Un examen completo de la vista puede garantizar que su visión sea lo más clara posible. También puede ayudar a identificar enfermedades oculares, muchas de las cuales no presentan síntomas tempranos evidentes, como el glaucoma.
La parte más frecuente de un examen ocular es la revisión de la visión utilizando una tabla de Snellen (la famosa tabla alfabética). Los exámenes regulares ayudan a su médico a observar cómo cambia su visión con el tiempo y a asegurarse de que obtenga la prescripción más precisa posible. Asegúrese de traer sus anteojos o lentes de contacto a la cita si los usa.
Además de evaluar su visión, su médico también examinará la salud de los ojos. Una parte de esto es obtener su historia médica para detectar cualquier problema genético que pueda afectar los ojos. Su médico le administrará una prueba de los músculos oculares y le pedirá que siga una pequeña luz con los ojos. Esto le permite determinar cualquier debilidad o falta de coordinación.
El médico también le dilatará los ojos con gotas. Esto le permite ver el interior del ojo y examinar el nervio óptico y la retina. Esta prueba ayuda a prevenir y tratar afecciones oculares que podrían provocar pérdida de la visión. Asegúrese de llevar sus gafas de sol para usar cuando salga para ayudar a que los ojos se adapten a la luz del sol.
Si tiene más de 60 años, es posible que quiera hacerse una prueba adicional de la vista. Estas pruebas buscarán afecciones como glaucoma, cataratas y degeneración macular relacionada con la edad. Un examen completo de la retina le permite al médico revisar la parte posterior del ojo para asegurarse de que los vasos sanguíneos que "alimentan" la retina estén sanos.
Un examen de detección de glaucoma es otro examen frecuente para este grupo etario. Se realiza con una prueba llamada tonometría, que mide la presión del líquido dentro de los ojos.
Dado que la mayoría de los exámenes implican la dilatación de las pupilas, puede ser recomendable llevar a alguien que lo lleve a su casa. También recibirá recomendaciones de su oftalmólogo sobre cómo mantener la salud ocular y, si su visión ha cambiado, recibirá una receta actualizada para anteojos o lentes de contacto nuevos.
Este contenido no pretende sustituir el asesoramiento médico profesional, el diagnóstico ni el tratamiento. Consultá siempre a tu médico o a otro profesional de la salud calificado ante cualquier duda que tengas sobre una condición médica.