Un sueño de calidad es esencial para gozar de buena salud mental. Al igual que un auto eléctrico, el cerebro necesita recargarse para funcionar de la mejor manera. Dormir bien durante la noche puede ayudar a mejorar la concentración, el estado de ánimo y la creatividad. El sueño ayuda a procesar información nueva y crear recuerdos. También fortalece el sistema inmunitario.
Puede funcionar bien con un poco de sueño de mala calidad. Pero podría afectar su estado de ánimo y tal vez le resulte difícil concentrarse como le gustaría. La falta extrema de sueño, como el insomnio, puede tener un impacto real en la salud mental. Por lo tanto, si duerme más mal que bien, es hora de prestar atención y hacer algunos cambios.
Nunca es demasiado tarde para generar nuevos hábitos o mejorar los hábitos de sueño actuales. A continuación compartimos algunos consejos útiles.
Si tiene dificultades para salir de la cama por la mañana, pruebe lo siguiente:
Recuerde que el sueño temprano por la mañana es de menor calidad. Debería evitar dormir de más a la mañana. Así podrá disfrutar de un sueño de mayor calidad por la noche.
Si tiene dificultades para conciliar el sueño por la noche, intente lo siguiente:
La meta es dormir de forma natural. No podemos forzarnos a dormir. Pero podemos construir una base para que el sueño sea saludable.
Eso incluye a qué hora nos despertamos y cuándo nos vamos a dormir. Intente irse a dormir y levantarse a la misma hora todos los días. Ser constante le ayudará a tener un sueño saludable.
Mientras pone a prueba nuestros consejos útiles, debe saber que es posible que duerma bien durante la noche y que aún así se despierte con sueño. También puede pasar un día normal luego de dormir poco. Debe evitar creer el mito más rígido sobre el sueño: Una buena noche de sueño significa que todo está bien, y una noche sin dormir significa que el día siguiente será un desastre. Esta mentalidad puede provocar ansiedad y más inquietud. Ser flexible le da más margen para relajarse, lo que facilita que el sueño sea de buena calidad.
Después de probar los consejos, ¿sigue teniendo muchas dificultades para dormir? Podría estar sufriendo un trastorno del sueño, como apnea del sueño, un trastorno del ritmo circadiano o el síndrome de las piernas inquietas. Debería buscar atención médica adicional. Hay posibles soluciones para usted. Entre ellas se incluyen la terapia cognitiva conductual para el insomnio (CBT-I) y un diario de sueño para hacer un seguimiento de cómo duerme.
Este contenido no pretende sustituir el asesoramiento médico profesional, el diagnóstico ni el tratamiento. Consultá siempre a tu médico o a otro profesional de la salud calificado ante cualquier duda que tengas sobre una condición médica.