Cocinar para una sola persona puede ser abrumador, especialmente cuando teme tener que limpiar después. Al mantener las cosas simples, puede limitar su tiempo en la cocina, tanto para la preparación como para la limpieza. Además, es posible que le resulte más fácil preparar un platillo equilibrado (50% de verduras sin almidón, 25% de proteína magra y 25% de carbohidratos) y apegarse a sus metas de salud cuando cocine solo para usted mismo. Aproveche al máximo su tiempo en la cocina dominando el arte de cocinar para una sola persona con estos cuatro consejos:
Cuando elabore su plan de comidas para la semana, trate de usar varios de los mismos ingredientes en diferentes platos. Esto ayudará a reducir el desperdicio y el tiempo dedicado a la preparación. Además, facilitará las compras y le permitirá disfrutar de comidas que lo satisfagan.
Por ejemplo, quizá desee comprar una bolsa de espinacas frescas para preparar una deliciosa ensalada, pero sabe que no usará la bolsa entera antes de que se eche a perder. Esta misma bolsa de espinacas se puede usar en un smoothie para la mañana, saltear en su plato de pasta favorito o calentar en un tazón de sopa para comer un poco más de verduras.
Guardar los alimentos en el congelador prolonga su vida útil. Puede congelar fácilmente porciones individuales para usar solo lo que necesite y mantener el resto correctamente guardado en el congelador.
¿Qué ventaja tiene congelar? A veces es más rentable comprar al por mayor, ¡así que no deje que cocinar para una sola persona le impida perderse una gran oferta! Las proteínas frescas, como el pollo, la carne de res, el cerdo y el pescado, se pueden dividir y guardar en bolsas resellables en el congelador. Solo asegúrese de descongelar la noche anterior en el refrigerador (no en el mostrador) antes de cocinar.
Guarde sus frutas y verduras frescas en lugares distintos. Las frutas maduras liberan gas etileno, que puede provocar que los productos que estén junto a ellas maduren más rápido. Las frutas frescas enteras, como el mango, el durazno y la piña, procure mantenerlas en algún lugar sobre el mostrador hasta que maduren. Una vez que estén maduras, guárdelas en el refrigerador para que se conserven más tiempo y no se echen a perder tan rápido. Es maravilloso tener a la mano productos frescos, pero las frutas y verduras enlatadas y congeladas también son una opción excelente.
No descarte una receta porque produzca múltiples porciones. Puede comerla varios días de la semana. La sopa, el chili y los platillos preparados en la olla de cocción lenta son algunas excelentes opciones para prepararse en grandes cantidades. Congele las porciones sobrantes para disfrutarlas después. Si la receta le sigue pareciendo demasiado grande, prepárela usando solo la mitad de los ingredientes.
Encuentre a continuación algunas recetas divertidas de una sola porción. Tenga en cuenta que siempre puede duplicar y guardar, así como combinar recetas de ingredientes similares para la semana siguiente.
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Muffin inglés abierto con verduras
Frittata de queso suizo, champiñones y brócoli
Burrito de col con frijoles negros
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Este contenido no pretende sustituir el asesoramiento médico profesional, el diagnóstico ni el tratamiento. Consultá siempre a tu médico o a otro profesional de la salud calificado ante cualquier duda que tengas sobre una condición médica.